Gratitud infinita por el nuevo año 2019 que llega

Pastoral de la Salud

¡Feliz y bendecido año 2019¡

Iniciamos un nuevo año con la gracia y bendición de Dios. Uno en el que seguramente vendrán nuevas oportunidades, retos, sacrificios, éxitos, logros, etc.

Lo que siempre pedimos para el nuevo año que llega es: salud, trabajo y unión. ¿No es así?

Es verdad que no está totalmente en nuestras manos tener una vida saludable. Continuamente estamos sujetos a los factores ambientales, químicos, tóxicos, etc. Y muchas veces hasta un mosquito nos puede llevar a la cama por varios días, pero sí que podemos poner de nuestra parte para que nuestra salud se encuentre en buenas condiciones. Es decir, no exponernos corriendo riesgos que no son necesarios. Busquemos ante todo la prevención, con hábitos higiénicos y de salud que nos acompañen durante los 365 días del año.

Por otra parte, este domingo 6, día de la Epifanía del Señor celebraremos el día de la Enfermera o Enfermero.

Estas personas que nos cuidan, atienden y se preocupan de nuestra salud cuando nos encontramos en el hospital merecen nuestro reconocimiento y respeto.

Muchos de ellos son como esa luz que encienden el día de su graduación, pues llevan la esperanza de aliviar el dolor y consuelo que cura.

Recientemente el papa Francisco en una de sus homilías en la Casa de Santa Martha dijo, hablando de la ternura de Dios: “La imagen que me viene es la de las enfermeras, la de una enfermera en un hospital, que cura las heridas una a una, pero con sus manos.

Dios se involucra, se mete en nuestra miseria, se acerca a nuestras llagas y las cura con sus manos, y para tenerlas se hace hombre”.

Por este motivo, la Pastoral de la Salud quiere hacer presentes a todas las enfermeras y enfermeros con una Celebración Eucarística el día 6 en la parroquia de Nuestra Señora de Fátima (García Ginerés), en la misa de 12.

Ahí ofreceremos la misa por ellos y les daremos su bendición encomendándolos a Dios para que su servicio esté siempre fortalecido por su gracia.

Están todos invitados a darle gracias a Dios por los cuidados que hemos recibido de estas personas. Y al mismo tiempo para pedir que cada día existan más hombres y mujeres que quieran servir a la sociedad como enfermeras o enfermeros.

Dios les pague y les recompense la enorme labor que realizan en bien del ser humano, de toda la persona. Muchas gracias enfermeras, que Santa Águeda patrona de las enfermeras interceda por ellas, proteja y acompañe.— Presbítero Alejandro de Jesús Álvarez Gallegos, coordinador diocesano para la Pastoral de la Salud